Para la coalición migrar es un derecho y esto no es negociable. Hablar de migración selectiva supone comprar el marco a la derecha y avalar una mentira: la existencia de migración buena y mala.
El grupo parlamentario de Sumar ha mostrado este viernes su preocupación ante las declaraciones recientes del Lehendakari Imanol Pradales y de otros portavoces del PNV sobre inmigración, que apuntan hacia una visión utilitarista y condicionada por criterios económicos. Durante el pleno de control en el Parlamento Vasco, el parlamentario Jon Hernández ha interpelado al Lehendakari y ha alertado del riesgo de “abrir la puerta a políticas migratorias selectivas que clasifican a las personas migrantes según su supuesta utilidad para el mercado laboral”.
Hernández ha citado expresamente unas declaraciones de Pradales en las que planteaba “ver qué inmigración necesita Euskadi y cuál es la que llega”. A juicio de Sumar, este enfoque “reduce a las personas migrantes a mera mano de obra”, lo que supone una grave ruptura con el enfoque de derechos humanos que debe guiar las políticas públicas. “Nos preocupa que desde el Gobierno se distinga entre migrantes buenos y malos, o entre personas válidas y descartables según lo que demande la economía”, ha señalado el parlamentario.
En su intervención, Hernández ha recordado que este tipo de discursos, lejos de ser neutros, están siendo utilizados por sectores de la derecha y la extrema derecha para justificar políticas migratorias restrictivas. “Poner en cuestión el consenso social en torno a Euskadi como tierra de acogida es tremendamente peligroso en el contexto actual”, ha advertido.
En su segunda intervención, el parlamentario de Sumar ha pedido explicaciones claras al Lehendakari sobre si su Gobierno está promoviendo un cambio de enfoque en materia migratoria. “¿Vamos a seleccionar a las personas migrantes? ¿Esa es la política que va a defender el Gobierno Vasco? Espero que no”, ha insistido.
Sumar ha sido contundente al recordar que las personas migrantes no pueden ser vistas como herramientas al servicio de las necesidades locales. “No se trata de ver qué nos conviene. Se trata de garantizar los derechos humanos y ofrecer acogida, protección e inclusión a quienes llegan a Euskadi, sea cual sea su procedencia o perfil laboral”, ha afirmado Hernández.
La formación ha advertido de que no respaldará ningún intento de aplicar filtros selectivos o criterios pragmáticos que supongan una regresión en materia de derechos. “Las políticas migratorias deben construirse desde la solidaridad, la justicia y la igualdad. Euskadi debe mantenerse firme como tierra de acogida”, ha concluido.